Sinopsis: Esta vez, contará la historia de Heather Mason y su padre. Cuando ella cumple los dieciocho años sufrirá terribles pesadillas y tras la desaparición de su padre, Heather descubrirá que no es quién realmente piensa.
Crítica: Amor en Silent Hill.
BA-SU-RA. Con esa palabra, tres sílabas, seis letras, tres vocales y tres consonantes, podemos definir este despropósito. Menudo pedazo de basura más enorme. Lo digo completamente en serio.
Y es que, después de ver la increíble y magnífica "Silent Hill" (2006), ver esto... menudo abismo de diferencia.
Esto no se puede comparar con la anterior entrega. Ni con la anterior entrega ni con un film medianamente decente. Porque esto, como ya he dicho, es un bodrio. En muchos sentidos, además.
Comenzando por el guión.
El guión no tiene por qué ser malo, porque el argumento no está mal del todo, pero es pésimo.
A parte de que no explican NADA de cómo vuelve Sharon al mundo real, ni qué pasó con ellas, ni nada, simplemente nos lo ponen, podemos observar una cosa bastante negativa y poco profesional.
Este guión es un compendio de vete tú a saber de qué. Nos intentan mezclar tantas cosas que acaba siendo todo en conjunto una birria.
Nos ponen, en una hora y media de metraje, un montón de cosas, tantas que saturan nuestro cerebro.
Entre un padre secuestrado, un amor adolescente, el rollo de que la protagonista es la parte bondadosa de Alessa, además de la supuesta trama que tiene y los monstruos que le introducen. Por no seguir diciendo cosas.
Y es que, en mi opinión, el amor adolescente sobraba.
Sí, está muy bien que lo pongan para los amantes del romance al estilo "somos adolescentes, te acabo de conocer y ya sé que eres el amor de mi vida", pero en películas así no nos pongan eso, por favor. Nos introducen esa relación ahí como pueden con calzador, y hace más mal que bien.
Es más, llega a cansar bastante la parejita. Por no decir que hartan bastante.
Y ahí no termina todo, ojalá.
Los efectos especiales son al puro estilo serie-B. MUY CUTRES.
Las actuaciones son horrorosas. Entre los efectos especiales y las interpretaciones llegas a dudar de si estás viendo un telefilm de domingo o una película de Silent Hill.
El maquillaje: patético. Para los monstruos todo perfecto, un maquillaje excepcional. Pero luego que al lado pongan a una actriz con la cara al puro estilo Blancanieves y el cuello sin pintar, dejándolo del color de la piel, me parece que causa un contraste llamativo... y penoso. Es realmente lamentable. Y además, Alessa parece una chica gótica, no diabólica. Causa risa más que otra cosa.
Por no hablar del desarrollo... es 100% videojuego (cualquier juego, no necesariamente Silent Hill). La protagonista llega a un sitio y al final se encuentra con el jefe final (por decirlo así), el monstruo más fuerte del lugar. Y eso se repite con cada lugar que visita. Patético. Igual de patético que el final. Lo ponen como si fuera épico y es deplorable.
Esto es verdaderamente lamentable y penoso.
Actuaciones malas, efectos especiales malo, una fotografía cutre a más no poder, un final patético, unos monstruos aceptables (algunos sospechosamente parecidos a los de Hellraiser) y nada bueno que destacar.
Hay películas peores, sí, pero esto roza lo vergonzoso.
Mi nota: 2,8 sobre 10.
Entre un padre secuestrado, un amor adolescente, el rollo de que la protagonista es la parte bondadosa de Alessa, además de la supuesta trama que tiene y los monstruos que le introducen. Por no seguir diciendo cosas.
Y es que, en mi opinión, el amor adolescente sobraba.
Sí, está muy bien que lo pongan para los amantes del romance al estilo "somos adolescentes, te acabo de conocer y ya sé que eres el amor de mi vida", pero en películas así no nos pongan eso, por favor. Nos introducen esa relación ahí como pueden con calzador, y hace más mal que bien.
Es más, llega a cansar bastante la parejita. Por no decir que hartan bastante.
Y ahí no termina todo, ojalá.
Los efectos especiales son al puro estilo serie-B. MUY CUTRES.
Las actuaciones son horrorosas. Entre los efectos especiales y las interpretaciones llegas a dudar de si estás viendo un telefilm de domingo o una película de Silent Hill.
El maquillaje: patético. Para los monstruos todo perfecto, un maquillaje excepcional. Pero luego que al lado pongan a una actriz con la cara al puro estilo Blancanieves y el cuello sin pintar, dejándolo del color de la piel, me parece que causa un contraste llamativo... y penoso. Es realmente lamentable. Y además, Alessa parece una chica gótica, no diabólica. Causa risa más que otra cosa.
Por no hablar del desarrollo... es 100% videojuego (cualquier juego, no necesariamente Silent Hill). La protagonista llega a un sitio y al final se encuentra con el jefe final (por decirlo así), el monstruo más fuerte del lugar. Y eso se repite con cada lugar que visita. Patético. Igual de patético que el final. Lo ponen como si fuera épico y es deplorable.
Esto es verdaderamente lamentable y penoso.
Actuaciones malas, efectos especiales malo, una fotografía cutre a más no poder, un final patético, unos monstruos aceptables (algunos sospechosamente parecidos a los de Hellraiser) y nada bueno que destacar.
Hay películas peores, sí, pero esto roza lo vergonzoso.
Mi nota: 2,8 sobre 10.
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