Sinopsis: De pequeño logró hacer algo que supuso el fin de cuantos lo intentaron: mató a Jason Vorhees, el terrible criminal que aterrorizó a los habitantes de Cristal Lake. Y ahora, años más tarde, Tommy se siente atormentado por el miedo de que no esté realmente muerto. Así que Tommy y un amigo van al cementerio y excavan la tumba de Jason. Desgraciadamente para Tommy (y más aún para su amigo), en lugar de encontrar un cadáver descomponiéndose, descubren que Jason se ha conservado a la perfección.
Crítica: Jason vuelve, de la peor manera posible.
Ya van seis películas de esta saga. Seis películas en que el nivel de ellas va decayendo drásticamente de una manera vertiginosa. Y si creía que era imposible superar a la quinta parte, en cuanto a mala calidad, era porque todavía no había visto "Viernes 13 Parte 6: Jason vive". Es que, sinceramente, esta entrega es una porquería descomunal, en mi opinión.
Vuestro tiempo (y el mío también) es demasiado importante como para estar perdiéndolo viendo esta clase de basuras.
Aunque respeto a quien le guste este film, eso siempre; pero no comparto su opinión.
Para empezar: el argumento. Tommy yendo al cementerio para desenterrar a Jason en un día de tormenta. Parece ser que si no hubiera tormenta eléctrica no estuviera contento y no iba a ir al cementerio. Luego, le da un lapsus y comienza a clavar un trozo de valla metálica a Jason y la deja ahí. Y justo cae un rayo en el trozo de valla (más comúnmente llamado en física "efecto punta") y resucita a Jason cual Frankenstein en 1931.
Hay algo que no me cuadra. Para empezar, el lapsus que sufre Tommy, a parte de verse forzado, hace que resucite Jason. Pero Jason llevaba más de diez años en esa tumba. ¿Y el rigor mortis? Porque cuando le cae el rayo comienza a moverse y se mueve mejor que nadie.
Y no solo deja atrás el rigor mortis, sino que también parece que le den súper poderes. Por mucho que sus víctimas corran y Jason vaya caminando, el célebre asesino siempre atrapará a esas pobres personas que él ansía matar. Y por muchas balas que le disparen, sigue sin sufrir daños. Y más tarde se verá que aunque esté años debajo de un lago con el cuello partido, seguirá estando vivo, pero esto no concierne esta película.
Además de todo eso, lo cual ya me parece suficiente como para calificar a esta película de "cutre", podemos ¿apreciar? que el guión parece escrito por párvulos. Entre diálogos completamente estúpidas e incoherentes, situaciones forzadas e idiotas, y escenas de risa, el guión es un puro estropicio.
Y ahí no queda todo. Lo que más gracia me hace es que los mismos errores que tenían las anteriores películas las vuelven a poner aquí, y no solo eso, sino que además las refuerzan y las aumentan, tanto en cantidad como en mala calidad.
Personajes de relleno a montones que dan lugar a muertes sin ningún interés y que, además, siguen siendo poco explícitas, aunque ya no tanto.
Un argumento repetido hasta la saciedad donde vemos un Jason cada vez más parecido a un súper-villano que a un asesino en serie.
Y, para finalizar, ¿Tanto costaba poner al mismo Tommy? Es verdad que el actor rechazó el papel, pero insistid más, o poned a alguien que se parezca más. En resumen: que se hubiera esforzado más, en lugar de poner a un actor que solo sabe poner caras exageradas y raras.
Guión digno de ser quemado, un argumento hecho para adolescentes en plena pubertad y sin ningún sentido lógico ni racional.
Jason y las muertes causadas por él que dan lástima teniendo en cuenta la calidad del film y en lo que eso influye a la hora de valorar la película.
Mala, mala, mala, mala, mala, mala, mala, mala, mala, mala, mala, mala y mala.
Mi nota: 2,3 sobre 10.
Retifica....los Inspectoresde Hacienda nunca mueren
ResponderEliminarJajajaajjaaj. Es verdad
Eliminar